Y fuimos felices juntos, juro, que llegué a tocar ese cielo que prometías con tus besos con la puntita de los dedos. Y ahora te has ido, te he echado, quién sabe por que motivo. no me acuerdo como empezó la discusión ni a quien le toca ahora pedir perdón. Pero eso tampoco importa, por que amar se trata de eso, de no tener que decir nunca lo siento, de entenderse con miradas, de comprender el amor en un beso, de noches despierta a las dos de la mañana y un despertador programado a las siete y media pero que más da, está conectado. y el amor es mucho más que sexo. amar es hablar, dialogar, entender, que no haya necesidad de aparentar, amar es poder ser uno mismo. amar es entender que antes del sexo, también hay abrazos. pero claro, todo lo que empieza acaba y el amar como todo lo bueno conlleva consecuencias, arañazos, rasguños imborrables en ese órgano co-ra-zón. Y duele, amar duele, duele como una primera vez constante, como un beso que no tienes y que no sale de tu cabeza, como un te quiero que era mentira y te hizo sentir única, como todas las verdades que te dijo siendo mentiras. el amor duele, el amor ríe, el amor llora, el amor ilusiona, el amor ama. el amor consigue que la persona más dura se vuelva blanda, que los defectos sean cualidades de una persona, hace que los defectos no importen lo más mínimo, hace la perfección de una persona imperfecta. Eras perfecto, eres perfecto.
